Los probióticos son microorganismos vivos que sobreviven al paso por el tracto gastrointestinal y que ejercen efectos beneficiosos sobre la salud de quien los consume, especialmente, por su capacidad de contribuir a mejorar el equilibrio microbiano intestinal. Éstos compiten por los nutrientes y por los sitios de adhesión, e inhiben la proliferación de microorganismos patógenos.
También estas especies pueden sintetizar ácidos orgánicos que reducen el pH intestinal y retardan el crecimiento de bacterias patógenas sensibles al pH. Los productos lácteos fermentados, como el yogur, el kéfir y preparados, alimentos o suplementos probióticos, contienen Lactobacillus, bifidobacterias y otras formas bacterianas beneficiosas. Otro tipo de alimentos fermentados como el chucrut también se cultivan con cepas de Lactobacillus. Sin embargo, es muy variable el número de microorganismos viable en los productos probióticos comerciales. Actualmente no se sabe en qué medida pueden llegar estos microorganismos viables al intestino grueso y, allí, ser lo suficientemente competitivos para colonizarlo, mantenerse activos y ejercer los efectos beneficiosos que se les atribuye. En cualquier caso, sí parece haber total coincidencia en que, para que se puedan manifestar los efectos beneficiosos asociados tanto a los microorganismos presentes como los valores nutritivos presentes en estos alimentos, debe haber un consumo regular y prolongado.
BIBLIOGRAFÍA:
●Eva Gimeno Creus (2004). Alimentos prebióticos y probióticos. Offarm. https://www.elsevier.es/es-revista-offarm-4-articulo-alimentos-p rebioticos-probioticos-13061800
●Nino Binns (2013). PROBIOTICS, PREBIOTICS, AND THE GUT MICROBIOTA. ILSI. https://ilsi.eu/publication/probiotics-prebiotics-and-the-gut-microbiota/
●British Dietetic Association (2019). Fermented foods. https://www.bda.uk.com/resource/fermented-foods.html